Yo opino, tú opinas, él opina …

¿Quién sería el idiota que propaló la máxima de que todas las opiniones son respetables? Eso es falso. Son respetables siempre las personas, pero sus ideas pueden ser criticadas, rebatidas e incluso refutadas. Es más, en una sociedad moderna e ilustrada, criticar las opiniones de los demás es un sacramento fundamental sin el cual la cultura se estanca y la convivencia degenera por acabar siendo zarandeada por los prejuicios dominantes.

Visto en perarduaadastra.eu

La revolución es un levantamiento

«La revolución no es una cena de gala. No se hace como una obra literaria, un dibujo o un bordado. No se logra con la misma elegancia, calma y delicadeza. Ni con la misma suavidad, amistad, cortesía, moderación y generosidad. La revolución es un levantamiento, un acto de violencia en el que una clase invalida a la otra.»

Mao Tse Tung